Tarde de primavera
¡Qué pálido está todo, qué rancio, marchito, muerto!
¿Dónde está la flor que trajo el tiempo?
En el valle todo está dormido, en el bosque hay silencio
y la tierra se convierte en una encrucijada.
Sin embargo, rara vez el ojo se plantea
Un mundo superior ha llorado por la esperanza del oído,
En el crepúsculo de la tierra las estrellas son nítidas,
Y un asilo para el alma sonríe imperecedero.
Y así sueño en la luz del otoño y observo
Que el follaje de los pájaros cae hacia adelante,
Una ribera desnuda en las honduras de la raya reflexiva,
Y la luna surca la tormenta de arena.
Susana Marín
1 Comentario
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Sofia Pérez
Querida Susana, tu poema es muy hermoso, Bendiciones