Tan cerca, tan lejos…

Sueño despierta -como en una nebulosa-.
Intentas sonreír… Y esa tristeza
que llora tu mirada hacia la rosa,
embriaga al sentimiento de pureza.
Te veo a cada instante… Y temblorosa
recreo en mi memoria la belleza
del amor entregado. Y busco -ansiosa-
bajo la misma luna, esa nobleza.
Un pálpito de luz nos aproxima
envueltos por el manto de la noche
-que sabe de la entrega- y legitima
esta melancolía -extraño broche-
cuajada con perfume -cortante espina-
tan cerca, mi bien, amando sin reproche.
…
Vendrá de nuevo a mí otra madrugada
preñada de esperanzas -cuando duermas-
tatuando de recuerdos tu almohada…
Y sentirás mi voz con el silencio
que mecerá la niebla enamorada
cubriendo ese vacío que presencio.
Susurra una oración la flor ajada
-marchita de ilusiones, sin anhelos-
queriendo florecer tras la nevada
que anuncia primavera en otros cielos.
El otoño se acerca a mi morada
preñando con la luna aquellos velos
bordados por sombras. Y esa lunada
dibuja el rostro amado -alzando vuelos-.
Nieves Merino Guerra
16 de septiembre de 2016
3 comentarios
Deja un comentario
You must be logged in to post a comment.
Beto Brom
Me encantó pasear por tus versos, poetisa.
Muy buena la música de fondo.
Neshicotes, javerá
Nieves Merino Guerra
Muchas gracias, mi querido javer Beto.
Acabo de descubrir dónde se co-rresponde…jajaja
Espero aprender pronto este intríngulis..
No encuentro dónde volver a editar para corregir algunos errores..
Paciencia.
Neshicotes hasta ti.
¡ Qué bellísimo paisaje!
Graciasssss
Shalom shabat.
Pilar Remartínez
Estimada Nieves:
Muchas gracias por tu valiosa presencia, y por tus bellos aportes.
Besos y abrazos desde este rinconcito de Mardid.
Pilar R