La melancolía
En la tristeza me encuentro atrapado,
mi fiel compañera en este andar.
No permitas que me abandones,
pues sin ti, me desvanecería al mirar
cómo la alegría presume de ser dueña.
La melancolía es mi morada,
en ella encuentro consuelo y desvelo.
Mi corazón se destroza al ver
que la felicidad me evade con su vuelo,
presumiendo de tenerme como suyo.
Mas no te alejes de mi lado,
oh tristeza, mi leal compañera.
En tu abrazo encuentro mi refugio,
en tus lágrimas se oculta mi espera,
mientras la alegría engañosa me acecha.
No me abandones, tristeza mía,
que en tu sombra encuentro mi consuelo.
Si la alegría me abraza un día,
no olvides que a ti vuelvo en desvelo,
pues solo en ti encuentro mi verdadera vía.
Susana Marín
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Silvana Sosa
Hermoso poema has realizado. Mis felicitaciones por tu creación. 🙂
Beto Brom
Me agradó tu estilo.
Prometo volver a leerte.
Shalom desde Israel, colega de la pluma