Danza de las Fuentes


Danza de las Fuentes
A mí el tiempo me va retorciendo,
las rodillas, columnas, y el cerebro;
una danza sutil de cambios,
un vaivén que en el cuerpo celebro.
Menos mal que tengo fuentes de alimentación,
para darle al coco, sin temor a la desconexión.
En cada arruga, una historia se anida,
como líneas de código en la piel tejida.
Las rodillas crujen como hojas en otoño,
caminando entre memorias, en un sueño.
Columnas que han sostenido años y risas,
guardan secretos en su arquitectura precisa.
Y el cerebro, el gran arquitecto del pensar,
afronta el tiempo con sabiduría al caminar.
Menos mal que hay fuentes de energía,
ideas que fluyen como ríos de poesía.
Alimento para el coco, combustible de la mente,
en cada palabra, un poder latente.
Así, aunque el tiempo retuerza y moldee,
la esencia perdura, como un verso que florece.
Que las fuentes de alimentación sigan fluyendo,
en la danza del tiempo, resistiendo y creciendo.
Porque en cada arruga y cada línea trazada,
se escribe la historia de una vida iluminada.
NatukaNavarro©